El ex gobernador del estado Táchira José Gregorio Vielma Mora, fue considerado como prófugo por una corte federal de Miami el pasado lunes 08 de Noviembre.
Así como a otros ciudadanos que vinculan con el empresario colombiano Alex Saab, presunto testaferro de Nicolás Maduro, actualmente bajo custodia de las autoridades estadounidenses tras su reciente extradición desde Cabo Verde.
Corte federal de Miami va por Vielma Mora.Captura de Saab y presencia en Vzla. del fiscal (CPI) Karim Khan muestra hacia donde van las cosas.Sistemas de Justicia locales e Internacionales dan pasos importantes en el desmontaje del aparato criminal líderizado por @NicolasMaduro pic.twitter.com/GH0jpI0sWn
— Iván Simonovis (@Simonovis) November 8, 2021
El periodista Joshua Goodman, de Associated Press publicó en su cuenta oficial de Twitter, que los otros personajes considerados como prófugos por la justicia americana son los siguientes: Álvaro Pulido ‘socio de Alex Saab, Emmanuel Enrique Rubio González, Ana Guillermo Luis y Carlos Rolando Lizcano Martínez.
Los últimos mencionados están señalados por Estados Unidos por la presunta participación en una red de blanqueo de dinero a través de un programa para suministrar comida y medicinas a Venezuela, junto al empresario colombiano Alex Saab, mejor conocido como los CLAP en Venezuela.
VIELMA MORA supervisaba junto con Alex Saab todo el proceso de los CLAP. Desde los sobreprecios y adulteración de calidad , hasta la entrega mano a mano a las victimas de la estafa. pic.twitter.com/OVelpzDt94
— victor garrido (@vgarrido20) November 9, 2021
Estos alimentos son considerados de baja calidad desde hace años y ahí es donde entra la c0rrupci0n de estos personajes, compraron productos de muy baja calidad y con un sobreprecio multimillonario para quedarse con el dinero que estaba destinado para las personas del sector popular venezolano.
El colombiano Álvaro Pulido, posee una recompensa de 10 millones de dólares por cualquier información que lleve a su detención, según la 4cus4ción del gran jurado federal del Distrito Sur de Florida, inflaron los precios de los productos que suministraban para lucrarse.
Entre mediados de 2015 y al menos 2020, conspiraron con otras personas para transferir sus ganancias en cuentas bancarias de otros países, incluido Estados Unidos.