Amigos cercanos destapan los últimos días de la cantante, marcados por hermetismo, tristeza y la falta de un adiós digno.
La partida de Dulce, una de las voces más queridas del espectáculo mexicano, ha dejado un vacío en sus seguidores y un eco de incertidumbre entre quienes estuvieron cerca de ella. Detrás del brillo y el glamour que caracterizó su carrera, emergen detalles dolorosos sobre sus últimos momentos: una despedida fría, sin cumplir sus últimas voluntades, y marcada por tensiones familiares que aún dividen opiniones.
«Amigos de Dulce rompen el silencio: ‘Su adiós fue inmerecido, no era lo que ella deseaba'»
Ofelia Cano, amiga entrañable de la cantante, revela desgarradores detalles sobre sus últimos días.
En una entrevista reciente, la actriz Ofelia Cano habló sobre la profunda conexión que tuvo con Dulce, describiéndola como su hermana del alma. Sin embargo, lo más impactante de su testimonio fue la descripción de la soledad y tristeza con la que la cantante vivió sus últimos meses.
“Dulce sabía que algo grave se avecinaba, pero decidió guardar silencio. Ella evitó hablar de su enfermedad y trabajó sin descanso, quizá con la intención de dejar un patrimonio para su familia,” reveló Cano.
Según la actriz, la cantante había preparado un vestido especial para su despedida, uno que compró en Turquía y que deseaba usar el día en que partiera de este mundo. Sin embargo, este deseo no se cumplió, pues su hija, Romina, optó por una ceremonia discreta que dejó a muchos de sus amigos y fans fuera de la despedida.
«Un adiós sin glamour: la hija de Dulce enfrentada a los deseos de su madre»
Romina tomó decisiones que han desatado críticas y dividieron a quienes conocieron a la cantante.
El hermetismo que rodeó la partida de Dulce fue evidente desde el momento de su deceso. Según Cano, Romina, la única hija de la cantante, decidió incinerar el cuerpo sin llevar a cabo un funeral público, algo que no solo dejó perplejos a los fans, sino también a amigos y familiares cercanos.
“Ella merecía una despedida a la altura de su legado. Dulce era un ícono del espectáculo, una artista que entregó su vida a sus fans y al escenario. No puedo juzgar a Romina, pero me duele que no se respetaran los deseos de mi comadre,” comentó Cano con evidente pesar.
Uno de los puntos más sensibles de esta situación fue la ausencia de maquillaje y vestimenta especial en el cuerpo de la cantante, algo que Cano calificó como “una despedida fría e inmerecida para una artista de su talla.”
«Tensiones familiares: ¿Romina priorizó su privacidad sobre el legado de Dulce?»
Amigos cercanos cuestionan si las decisiones de la hija reflejaron un respeto por la memoria de su madre.
A lo largo de la entrevista, Ofelia Cano también habló sobre la relación compleja entre Dulce y su hija. Aunque madre e hija se reconciliaron después de un conflicto que duró meses, el vínculo entre ambas nunca estuvo exento de tensiones.
“Romina siempre fue reservada y le disgustaba estar expuesta a los medios, algo completamente opuesto a Dulce, quien amaba a sus fans y jamás negó una entrevista,” explicó Cano.
Según la actriz, la hija de Dulce optó por mantener una ceremonia completamente privada, incluso para quienes consideraban a la cantante como parte de su familia. “No puedo juzgarla, pero siento que su decisión fue demasiado apresurada. No hubo tiempo para que sus amigos y seguidores le dieran el último adiós que ella merecía.”
«Depresión y soledad: los últimos días de Dulce revelan un lado desconocido de la cantante»
Ofelia Cano describe cómo la tristeza marcó los meses finales de su amiga y cómo intentó apoyarla hasta el final.
Dulce, quien siempre proyectó una imagen de fortaleza y energía en el escenario, vivió en privado un periodo de tristeza que solo pocos conocieron. Según Cano, la cantante sentía una profunda soledad, incluso cuando estaba rodeada de su familia.
“Mi comadre estaba deprimida, lo sé porque la veía. Trabajaba sin parar, pero siempre había algo en sus ojos, una tristeza que no lograba ocultar. Estaba cansada y no quería preocupar a nadie,” confesó Cano.
La actriz también relató cómo Dulce había comenzado a trabajar en un nuevo proyecto musical antes de su partida, un disco de rock que estaba destinada a ser su gran regreso. Sin embargo, este proyecto quedó inconcluso debido a su estado de salud.
«¿Despedida o silencio? Romina permanece ausente ante las críticas por la partida de su madre»
La hija de Dulce se ha mantenido alejada de los medios, mientras las críticas hacia sus decisiones no cesan.
A pesar de las críticas, Romina no ha emitido ninguna declaración pública sobre la partida de su madre o las decisiones que tomó respecto a su despedida. Este silencio ha sido interpretado de diversas maneras: algunos lo ven como un acto de prudencia, mientras que otros consideran que refleja una desconexión con el legado de Dulce.
Ofelia Cano fue enfática al afirmar que Dulce nunca estuvo peleada con su hija, pero que las diferencias entre ambas dejaron marcas difíciles de superar.
“Romina tiene un carácter muy fuerte, igual que Dulce. Aunque se amaban profundamente, no siempre estuvieron de acuerdo, y eso afectó a mi comadre emocionalmente,” añadió.
Conclusión: El adiós que Dulce merecía, pero nunca tuvo
La partida de Dulce no solo dejó un vacío en el mundo del espectáculo, sino también muchas preguntas sin respuesta sobre la forma en que fue despedida. Para una artista que entregó su vida al público, su adiós careció del amor y reconocimiento que sus fans esperaban darle.
“Dulce merecía una despedida llena de amor, música y homenaje. Lo que ocurrió no le hace justicia ni a su legado ni a su historia,” concluyó Cano.
Mientras su familia y amigos intentan lidiar con la pérdida, el legado de Dulce sigue vivo en sus canciones y en los corazones de quienes la conocieron. Sin embargo, su partida nos deja una lección importante sobre la importancia de honrar la memoria de aquellos que lo dieron todo en vida, tanto en el escenario como en el amor que brindaron a quienes los rodeaban.