En la montaña de Sorte, capital del espiritismo en Venezuela, los habitantes han optado por emplear un nuevo método, poco común, para curarse del c0v!d. Derrumban de una la patada una pira en llamas para luego caminar descalzos sobre ella.
Hay varios rituales dedicados al fin de la p4ndemi4 en la montaña. Toman troncos en llamas y se lo 3str3llan contra su cabeza, la cuál está adornada con plumas. Además se comen pedazos del troncó ardiente mientras un compañero les escupe agua ardiente.
“!Fuerza!” les gritan durante el baile en candela, celebrado en la montaña del estado Yaracuy, donde supuestamente según su tradición apareció María Lionza, diosa de este culto sincrético que mezcla elementos de las religiones indígenas, africanas, además del catolicismos.
“Lo hacemos en homenaje a la reina en especial para que nos aleje de esta p4ndemi4”, dice un docente de 40 años de edad, antes de lanzarse al fuego.
El día de la resistencia indígena cada 12 de septiembre, miles de creyentes van a este lugar selvático del 3spiritism0 y la s4nterí4 para rendir culto a la imagen de María Lionza. No pudieron asistir el año pasado por al contingencia sanitaria
Este año muchos aseguraron estar inmunizados y asistieron a la ceremonia que demuestra el poder del los 3spir!tus en la tierra, en el ritual cantan: “¡Que venga, que venga, que no le tengo mi3d0!”, corean entre todos.
Unas 5.000 personas se acomodaron alrededor de la montaña en campamentos donde supuestamente María Lionza aparece como una Virgen sonriente.
“Preparé mi tecito, mi cosa, me llevé mi ropa pa’ allá arriba y me eché un baño de agua fría sin nada de ropa, me sacudí esas energías negativas con jabón azul”, comenta la espiritista de 57 años.